“Yo soy Santiago Apóstol, discípulo de Cristo, hijo de Zebedeo, hermano de Juan el Evangelista, a quien con su inefable gracia se dignó elegir el Señor, junto al mar de Galilea, para predicar a los pueblos; al que mató con la espada el rey Herodes, y cuyo cuerpo descansa ignorado en Galicia, todavía vergonzosamente oprimida por los sarracenos. Por esto me asombro enormemente de que no hayas liberado mi tierra, tú que tantas ciudades y tierras has conquistado. Por lo cual te hago saber que así como el Señor te hizo el más poderoso de los reyes de la tierra, igualmente te ha elegido entre todos para preparar mi camino y liberar mi tierra de manos de los musulmanes, y conseguirte por ello una corona de inmarcesible gloria. El camino de estrellas que viste en el cielo significa que desde estas tierras hasta Galicia has de ir con un gran ejército a combatir a las pérfidas gentes paganas, y a liberar mi camino y mi tierra, y a visitar mi basílica y mi sarcófago”. -El sueño de Carlomagno-.
Contexto histórico.
Carlomagno
diseñó un sistema defensivo de sus fronteras. Según este sistema,
los territorios fronterizos que se anexionaban al imperio tenían un
estatus diferente y estaban gobernadas por un marqués (de ahí el
nombre de marca) que ostentaba tanto el poder civil como el militar.
La autonomía que se le otorgaba al marqués permitía respuestas
rápidas para sofocar revueltas y ataques en territorios que aún no
se habían integrado plenamente al imperio. La Marca Hispánica era
el territorio comprendido entre la frontera de su imperio carolingio
con Al-Ándalus (al sur de los Pirineos) desde el siglo VIII hasta su
independencia en reinos y condados.
“La
Marca Hispánica iba desde Pamplona hasta Barcelona alcanzando mayor
protagonismo la de Pamplona, constituido en el primer cuarto del
siglo IX en reino; Aragón, constituido en condado independiente en
809; Urgel, importante sede episcopal y condado con dinastía propia,
y el condado de Barcelona.” Fuente.
La
ambición de Carlomagno fue extender sus dominios, y no quiso
desaprovechar la oportunidad que se le presentó en el año 777. En
ese año se presenta en Westfalia una embajada enviada por los valíes
de Zaragoza, Huesca y Barcelona y encabezada por el de Zaragoza,
Sulayman ben al-Arabí. Se habían rebelado contra el emir
Abderramán I
y ofrecieron a Carlomagno su sumisión a cambio de su ayuda militar,
una
proposición que no podía rechazar. Organiza
dos columnas que entran una por el Pireneo catalán y otra por el
navarro, toma Pamplona, hace una demolición de sus murallas para no
tener resistencia en caso de repliegue de tropas, y se planta en
Zaragoza. Pero Zaragoza
no abrió sus puertas porque mientras Carlomagno desarrollaba y
planificaba la misión, el control de Zaragona había ido a las manos
de al-Husain ibn Yahya al-Ansari quien se negó a entregar la ciudad,
Sulayman quedó en evidencia y Carlomagno se vio obligado a
planificar un asedio para la ciudad. Los francos tenían tropas
suficientes pero no tenían avituallamiento y optó por regresar a
casa por el camino más corto, por el Pirineo navarro. Coge como
rehén a Sulayman y dado que Pamplona carecía de defensas todo
auguraba una vuelta plácida. Pero Carlomagno según la tradición
sufrió una emboscada en Roncesvalles (tal vez en Valcarlos en la
etapa Saint Jean Pied de Port – Roncesvalles caminando por el
valle) y unas mesnadas hostiles de gascones cristianos según defiende Vicente José González García, aparecieron por las cumbres arrojando
dardos y rocas sobre la columna de retaguardia de Carlomagno y les
infringieron una derrota dando paso al poema épico del cantar
de Roldán:
“El
rey Carlos, nuestro emperador magno ha estado siete años enteros en
España; conquistó la tierra alta hasta el mar, no hubo castillo que
se le resistiera, ni muro ni ciudad que no haya destruido, salvo
Zaragoza que está en una montaña. La tiene en su poder el rey
Marsil, que no ama a Dios pues sirve a Mahoma e invoca a Apolín;
pero no puede evitar que no le alcance algún mal. (…)
¡Ved
cuántos hay, Roldán! Están muy cerca de nosotros y Carlos
demasiado lejos. No os dignasteis sonar vuestro olifante;
si estuviera aquí el rey no sufriríamos daño alguno. Mirad hacia
arriba, hacia los puertos de Aspre, podréis ver la desgraciada
retaguardia; quien esté en ella no podrá estar en otra jamás.
La
batalla es terrible y dura. Oliveros
y Roldán
atacan con valentía; el arzobispo asesta más de mil golpes, los
doce pares
no le van a la zaga y los franceses atacan en grupo. Mueren los
paganos a cientos y a miles: el que no huye no se salva de la muerte;
quiéralo o no, deja allí su vida. Los franceses pierden sus mejores
protectores; no volverán a ver a sus padres ni a sus parientes ni a
Carlomagno que les espera en los puertos. (...)
Roldán
hace sonar de nuevo el olifante, y el esfuerzo le rompe las sienes.
Carlomagno lo oye, se apresura y hace sonar los clarines de su
hueste. Los sarracenos, al oírlo, dan un nuevo asalto a Roldán y a
Turpín, y huyen precipitadamente por temor a la hueste francesa, que
ya está muy cerca. (...) Viendo su muerte cercana, Roldán, ya
ciego intenta romper su espada Durendal para que no caiga en
poder del enemigo, pero su hierro es tan fuerte que se hiende la dura
piedra contra la que quiere quebrarla. Hace un elogio de ella, se
echa de bruces y la esconde bajo su cuerpo; y tras hacer su
confesión, con el rostro vuelto hacia España, ofrece su guante a
Dios, que recoge San Gabriel, y muere”.
Todo
esto sucedió en España
un 15/8/778 en la que el reino cristiano de Asturias trataba de
construirse y el emirato musulmán de Córdoba trataba de no
destruirse. Pero...
Construcción
del concepto épico como Historia fenoménica.
“Toda
construcción histórica que no quiera confundirse con un relato
mítico érase
una vez...debe
comenzar por el anacronismo de los fenómenos, por las reliquias, y
por quienes las han trabajado”.- Cfr.
Gustavo Bueno-.
Es
imposible hablar de Roldán sin su canción épica, sin el Poema de
Fernán González, sin el Romancero de Bernardo del Carpio y sin
Menéndez Pidal y Vicente José González García. “El poema épico es una
historia de acción, la cual concentra sus efectos de significado en
el acontecer, dejando de lado ornamentación secundaria. El poema
épico escenifica la agresividad viril en virtud a alguna gran
ventura. Básicamente, narra un combate y selecciona de sus
protagonistas un personaje poco común, el cual provoca nuestra
admiración, pese a que puede no salir victorioso en todas las
pruebas”.- Paul Zumthor-
Dejemos
los franceses a España regresados,
a
conquistar la tierra todos muy bien preparados;
volvamos
a Bernaldo, por gestas afamado,
que
las fuerzas de España había juntado.
Partió
Bernaldo del Carpio con toda su mesnada,
si
caen sobre moros, los habrían puesto en fuga;
siguieron
por un río muy bravo y caudaloso,
de
siempre llamado Ebro y así aún se llama.
Fueron
a Zaragoza a los pueblos paganos,
pidió
Bernaldo del Carpio al rey Marsil
que
diese la vanguardia a los caballeros castellanos
contra
los Doce pares, de esos pueblos lozanos.
Se
la otorgó y se la dio de buen grado,
nunca
antes Marsil tal ruego hubo escuchado:
partió
Bernaldo del Carpio con su pueblo animado,
de
gentes castellanas iba bien protegido.
Tuvo
la vanguardia Bernaldo esa vez
con
gentes españolas, ¡gentes de gran valer!;
vencieron
a los franceses rotundamente allí,
mucho
más dura fue que la primera vez.
Estrofas
140-144 del Poema
de Fernán González.
Vicente José González García en su libro Bernardo del Carpio y la batalla de Roncesvalles sostiene la tesis de que en Roncesvalles ocurrieron dos batallas, una en el año 778, acaecida en la vertiente francesa de los pirineos y en la que ni Bernardo ni Roldán podrían haber participado por ser muy niños; y otra, la verdadera, en suelo español, en la cual se produce la muerte de Roldán a manos de Bernardo del Carpio que comandaba tropas en alianza con huestes musulmanas de Marsilio.
Vicente José González García en su libro Bernardo del Carpio y la batalla de Roncesvalles sostiene la tesis de que en Roncesvalles ocurrieron dos batallas, una en el año 778, acaecida en la vertiente francesa de los pirineos y en la que ni Bernardo ni Roldán podrían haber participado por ser muy niños; y otra, la verdadera, en suelo español, en la cual se produce la muerte de Roldán a manos de Bernardo del Carpio que comandaba tropas en alianza con huestes musulmanas de Marsilio.
“No
se debe a los deseos españoles de presentar un émulo de Roldan ni a
lo que decía Marcelin Defourneaux: «La doble necesidad de hacer
participar a España en la gloria de Carlomagno y de salvaguardar al
propio tiempo el orgullo nacional ha encontrado su expresión en la
historia legendaria de Compostela y Oviedo y en la creación del
personaje de Bernardo del Carpio”. Vicente
José González García.
Bernardo nace según la
Crónica General de España de
Alfonso X el Sabio en el 794 fruto de un matrimonio celebrado en
secreto entre Sancho Díaz, conde de Saldaña y la infanta Dña.
Ximena hermana del rey Alfonso II El Casto, quien al optar por el
celibato, tenía reservado para su hermana un matrimonio de alianza
posiblemente con Francia.
La
relación marital de Ximena le produce tal contratiempo que decide
encerrarla en un convento, y al conde le saca los ojos y lo encarcela
en el castillo de Luna en León.
Bastardo
me llaman, rey,
siendo hijo de tu hermana;
tú y los tuyos lo dicen,
que ninguno otro no osaba;
cualquiera que de tal dicho
ha mentido por la barba
que ni mi padre es traidor
ni mala mujer tu hermana,
que cuando yo fui nacido,
ya mi madre era casada...
siendo hijo de tu hermana;
tú y los tuyos lo dicen,
que ninguno otro no osaba;
cualquiera que de tal dicho
ha mentido por la barba
que ni mi padre es traidor
ni mala mujer tu hermana,
que cuando yo fui nacido,
ya mi madre era casada...
“Se
da un paso más, si es corta la espada”.- Bernardo del Carpio-.
Según Alfonso X: “Andados XXVII
annos del reynado del rey don Alfonso el Casto..., pues que vio que
era viejo et de muchos días, enbio su mandadero en poridad a Carlos,
enperador de los romanos et de los alemanes et rey de los francçeses,
commo el non auie fijos, et sil quisiese venir ayudar contra los
moros, quel darie el reyno.”
“Bernardo, (Bernaldo según el rey
sabio), que participa ayudando al rey Marsil de Zaragoza, y apoyado
por las tribus vascas, derrota a la retaguardia del ejército
imperial en el desfiladero de Roncesvalles, donde muere lo más
granado de la nobleza: los Doce Pares de Francia, y entre ellos su
paladín Rolando o Roldán a quien reta y mata en duelo singular
Bernardo que se hace con la mítica espada Durendal, a la que al
sentirse herido el paladín francés, trata de romper golpeando
contra una roca, que lejos de romperse, se hunde en la peña sin
quebarse”. Fuente.
Cuéntame
una historia, abuela.
-Siglos
ha, que con gran saña,
por
esa negra montaña
asomó
un Emperador.
Era
francés, su vestido
formaba
un hermoso juego;
capa
de color de fuego
y
plumas de azul color.
-¿Y
qué pedía?
-La
corona de León.
Bernardo,
el del Carpio, un día
con
la gente que traía:
“¡Ven
por ella!”, le gritó...
De
entonces suena en los valles
y
dicen los montañeses:
-¡Mala
la hubisteis, franceses,
en
esa de Roncesvalles!
-Ventura Ruiz Aguilera.-
-Ventura Ruiz Aguilera.-
Bernardo
del Carpio fue siempre una realidad histórica en la tradición,
historiografía, romancero oral y literatura escrita. No obstante
José
Pellicer de Ossau Salas y Tovar, Pedro Mantuano y Menéndez Pidal
terminan negando la existencia del héroe. Pero en 1960, Vicente José
González García publica su tesis citada desmontando los errores de los
negacionistas. “Si el rey Fruela I al morir el año 768 dejaba dos
hijos de corta edad: Alfonso y Jimena, es imposible que diez años
después, el 778, apareciera esa joven, Jimena, como madre de un
guerrero que vence al más valiente de los franceses. Y esta
argumentación pelliceriana trajo como consecuencia que todo lo
referente a Bernardo del Carpio se creyera pura leyenda”.
Según
la tesis de Vicente José González Fernández, la primera batalla
ocurrió en Valcarlos
el 15 de agosto del año 778. En ella mueren Eginardo y Anselmo a las
órdenes de Carlomagno. Pero en la que muere Roldán, es en la de
Roncesvalles el 16 de junio del año 808 que enfrenta al emperador
con tropas hispanoárabes lideradas por Marsilio y Bernardo. Es la
participación musulmana en la segunda batalla lo que hace que los
francos muertos se consideren mártires, hecho que no se dio en la
primera batalla. Este tratamiento diferenciado se puede comprobar
estudiando los restos del Silo
de Carlomagno
o Capilla de Sancti
Spiritus de
Roncesavalles
y los de la Capilla
de Ibañeta.
El
mejor inicio de todos los caminos.
El
mejor inicio de todos los caminos de Santiago es el de Roncesvalles.
Hemos hecho un recorrido entre la Historia y la leyenda y una
construcción del concepto épico como Historia fenoménica. “Paso
natural del Pirineo desde los tiempos más remotos, en
Orreaga-Roncesvalles se instaló y creció un centro asistencial y
alberguería que acogía a los peregrinos tras el duro ascenso de la
cordillera y reconducía sus pasos hacia la meta final, ya casi
perceptible en sus corazones, de la todavía lejana tumba del
apóstol.
Ambas
circunstancias, el trágico descalabro de Roldán y la proyección
jacobea, dinamizaron de forma extraordinaria la vida de este enclave
pirenaico y dieron a la cultura universal dos obras literarias de
singular renombre: la famosa Chanson
de Roland
y la pormenorizada y peculiar visión de la ruta a Santiago escrita
en el siglo XII por Aimerico Picaud, el LiberSancti Jacobi”
Fuente.
Fue
sin duda Sancho Garcés I (905-925) quien aseguró el trazado jacobeo
que discurre por la vieja calzada romana hasta Pamplona, y de allí a
Nájera, para continuar hacia el oeste y culminar en Compostela.
Fuente.
Tras
el paso de Ultrapuertos, dejando los Pirineos atrás,
Orreaga-Roncesvalles significa para el caminante la puerta del último
tramo del Camino, a pesar de que todavía restan 780
kilómetros para la meta. Los peregrinos lo consideran el segundo
punto principal del Camino de Santiago, detrás de la catedral
compostelana por su fuerza histórica y simbólica.
La
pequeña y sencilla capilla gótica localizada junto al Silo de
Carlomagno constituye el único edificio que en Orreaga-Roncesvalles
rememora el culto a Santiago. Conserva un elemento singular, la
campana procedente de la antigua capilla de Ibañeta, donde servía
de esperanzador reclamo para los peregrinos que ascendían la cara
norte del Pirineo. Y es que la peregrinación a Compostela es, junto
al mundo Carolingio, el argumento esencial de Orreaga-Roncesvalles.
Fuente.
Podemos
considerar en sentido estricto como primer acto del peregrino, la
Misa del Peregrino.
Cuando
finaliza, el prior de la Real Colegiata o uno de sus canónigos,
llama a los peregrinos, cita sus países de origen, y los sitúa
delante del altar para darles su bendición. En ese momento, si tu
motivación no es religiosa, te ocurrirá como afirmaba Voltaire:
comienza
por tomar agua bendita, y acabarás creyendo.
El texto de la bendición es del siglo XI y todas las bendiciones que
se realizan en el Camino son posteriores a la de Roncesvalles.
Con
ocasión del Concordato
de 1851 mantuvieron su condición de Colegiatas: Covadonga,
Roncesvalles, San Isidro de León, Sacro Monte de Granada, San
Ildefonso, Alcalá de Henares y Jerez de la Frontera. Art. 21.4.
Todas las demás colegiatas, cualesquiera que fuera su origen,
antigüedad y fundación, quedaron reducidas a iglesias parroquiales
con el número de beneficiados que además del párroco se
contemplaron necesarios, tanto para el servicio parroquial, como para
el decoro del culto.
Peregrino,
si inicias tu camino en Roncesvalles y te contagias de su leyenda,
historia y espiritualidad, aunque tu pretensión sea la de hacer el
Camino como turigrino, o
por motivaciones culturales o deportivas, te sentirás sobrecogido
y tu Camino será un camino de luz y de búsqueda de un yo
renovado.
Buen Camino. Ultreia et Suseia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario