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domingo, 14 de enero de 2018

Orense ya permite que le hagan turismo. In tempore Sueborum



  En la película Calle Mayor de Juan Antonio Bardem se recrea una ciudad de provincias de los años cincuenta en España rodada en Logroño, Cuenca y Palencia en la que unos amiguetes combaten su aburrimiento existencial gastando bromas pesadas e idean hacer creer a Isabel, una solterona interpretada por Betsy Blair que Juan se ha enamorado de ella y que le va a pedir matrimonio. A diferencia de la obra en la que está inspirada La señorita de Trevélez, Isabel no es un personaje cómico, sino una mujer de gran sensibilidad presa de las convenciones sociales, educada para depender de un marido y se siente demasiado mayor para afrontar un cambio radical en su vida cuando descubre el engaño y medita coger el tren para huir del escarnio.
  Isabel es esa mujer bella, madura, escondida detrás de la lluvia en el cristal de la ventana sintiendo impotencia para combatir su destino. La metáfora es válida para aplicarla a esas ciudades españolas llenas de encanto, con un mundo interior maravilloso pero que no permiten como Isabel, que se las haga turismo.

  En Orense entre el 15/12/2017 y el 4/3/2018 se puede visitar con entrada libre la exposición In Tempore Sueborum (el tiempo de los suevos en la Gallaecia 411-585) con la propuesta de deconstrucción en el sentido que le dio al término Jacques Derrida del estereotipo del bárbaro salvaje e incivilizado como construcción de la imagen que legaron las élites intelectuales romanas de la barbarie frente a civilización. En definitiva, la inclusión de los suevos en el Tiempo histórico en lenguaje de Gustavo Bueno reconociendo la transitividad efectiva de sus procesos culturales, como podemos contemplar en dicha exposición en sus ritos funerarios y la acuñación de moneda.
                                             Sarcófago de San Martinho de Dumio.

  Con el Edicto de Milán se estableció la libertad religiosa en el Imperio Romano permitiendo la expansión del cristianismo y su estatus de legitimidad; con el Edicto de Tesalónica el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano. Eran tiempos de concilios teológicos que marcaron el rumbo de la Iglesia desterrando el arrianismo que negaba la divinidad a Cristo. En el occidente post-romano cuando suevos, vándalos y alanos se asientan en la Gallaecia, el cristianismo se encuentra en una fase de incipiente implantación conviviendo con prácticas paganas y con el influjo de Prisciliano al que Martín de Braga, el Apóstol de los suevos se encarga de combatir fijando la ortodoxia frente a la herejía. Un debate adelantado en el tiempo entre el teólogo protestante que solo acataba la Biblia en palabras de Marcelino Menéndez Pelayo a propósito de Prisciliano y Erasmo de Róterdam San Martinho de Dumio.
 La muestra nos descubre igualmente cómo la desaparición del entramado político y administrativo de Roma no se esfuma sino que convive en la época tardo romana en la Gallaecia de la mano de la implantación del cristianismo configurándose los ámbitos rurales y urbanos en el germen de lo que sería la ciudad medieval.

 La exposición cuenta con visitas guiadas y un ciclo de conferencias de expertos. La importancia del evento es sencillamente extraordinaria porque los suevos fueron el primer reino medieval de occidente, el primero de los pueblos bárbaros en convertirse al catolicismo y con Requiario como rey se acuñó moneda en Braga demostrando poder e independencia frente a Roma. Hemos subrayado la deconstrucción del concepto de barbarie tal y como nos la legaron las élites romanas reconociendo su transitividad en la Historia, subrayado el papel de Martin de Braga como un Erasmo adelantado frente a Prisciliano como un Lutero hereje, y el papel de la configuración de las zonas rurales y urbanas de los suevos como germen de la ciudad medieval. Pero doctores tiene la muestra, lo esencial es que Orense ya no quiere llorar detrás del cristal. Betsy Blair sabe que tiene un mundo interior maravilloso y nos permite que le hagamos turismo.

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